lunes, 19 de enero de 2009

Arrastrando un poco los pies...



Rutina me atrapa, con su lengua bífida y áspera,
me araña la sonrisa y me emborrona la imaginación,
acaba con la flotabilidad de mi alma con su suspiro sutilmente tóxico,
me envenena los sueños y hace pegagosa la suela de mis zapatos.
Es cierto que su esófago es cómodo y te permite acurrucarte entre 
venas venenosas pero no quiero caer más hacia abajo, 
no quiero dejar de intentar subir esa pendiente hecha 
de escamas de agujas de reloj de cuerda...


2 comentarios:

Edu dijo...

Poesia acida, versos con un toque de Rimbaud.
Un Saludo.

}{(((º} ¨ºo.O dijo...

Sabes que la rutina acabará con el fin de exámenes, y que los resultados valdrán la pena ;) Hasta entonces, ánimo! ^^